"TRAS LA PUERTA"
He cerrado los ojos, respirado profundo y he sentido el ansia de la espera.
Me he visto en el hall oscuro de un “mundo” compartido, esperando oír tus pasos tras la puerta.
He aguardado en profundo silencio a que el contraluz dibujara tu esbelta silueta, cuando abres nuestra puerta, refugiando en las sombras para que tu no me vieras.
Sin mediar palabra me pongo a tu espalda y poniendo mis manos sobre las tuyas, te he plantado con tierna violencia en la pared que hay tras la puerta.
He mordido tu cuello y pegado contra ti mi cuerpo, has abierto tus piernas, he palpado tu sexo, al hacerlo percibo que rezumas deseo.
Un giro brusco te pone de frente, he agarrado tu nuca, con mi lengua recorro tu cara, tus brazos rendidos, siento en mi pecho tu corazón que late deprisa, apoyando contra ti todo mi cuerpo me percato como tiemblan tus piernas.
Mi mano acaricia tu mejilla lentamente y mientras lo hago, un paso atrás retrocedo, mi mano alcanza tus pechos me recreo en el momento, sintiendo el sube y baja de ellos por tu respiración agitada.
En la penumbra veo el brillo de tus ojos que se clavan en los míos y me hablan de tu deseo sin decir una sola palabra, me dejo arrastrar por mi instinto, rompo los botones de tu camisa remango tu falda y arranco de su sitio tu tanga.
Te abrazas a mi cuello y tomándote por las caderas levanto tus pies del suelo, me rodeas con tus piernas, pegas tu boca a la mía y exhalas en ella tu dulce y cálido aliento.
Muerdo tus labios, suspiras, gimes, tiemblas, me abrazas fuerte cuando me sientes en ti, muy dentro, Tu espalda contra la pared, sin salida, tus caderas se contonean con frenético ritmo sacando de mi ese a****l que llevo dentro.
Estallamos juntos en intenso orgasmo cuando susurro en tu oído cuanto te deseo ….de tu garganta escapa un grito nacido del placer intenso.
Despacio resbalas por la pared, yo te acompaño sin escapar de tus entrañas, hasta llegar al suelo.
En la vieja madera reposas sobre mi sin dejar de abrazar mi cuello, lames mi cara agradecida y yo deposito en tu frente un tierno beso….
Apoyando tu cara en mi pecho escuchas el arrullo de una canción que conoces bien y sonríes
Suspiras, cierras los ojos y escuchas entre mis ronroneos una corta frase que se instala en lo mas profundo de tu alma…
“Te quiero “perra” mía”
Ahora tu mente solo desea que mañana “Tu Perfido Diablo” vuelva para esperarte tras la puerta.
Me he visto en el hall oscuro de un “mundo” compartido, esperando oír tus pasos tras la puerta.
He aguardado en profundo silencio a que el contraluz dibujara tu esbelta silueta, cuando abres nuestra puerta, refugiando en las sombras para que tu no me vieras.
Sin mediar palabra me pongo a tu espalda y poniendo mis manos sobre las tuyas, te he plantado con tierna violencia en la pared que hay tras la puerta.
He mordido tu cuello y pegado contra ti mi cuerpo, has abierto tus piernas, he palpado tu sexo, al hacerlo percibo que rezumas deseo.
Un giro brusco te pone de frente, he agarrado tu nuca, con mi lengua recorro tu cara, tus brazos rendidos, siento en mi pecho tu corazón que late deprisa, apoyando contra ti todo mi cuerpo me percato como tiemblan tus piernas.
Mi mano acaricia tu mejilla lentamente y mientras lo hago, un paso atrás retrocedo, mi mano alcanza tus pechos me recreo en el momento, sintiendo el sube y baja de ellos por tu respiración agitada.
En la penumbra veo el brillo de tus ojos que se clavan en los míos y me hablan de tu deseo sin decir una sola palabra, me dejo arrastrar por mi instinto, rompo los botones de tu camisa remango tu falda y arranco de su sitio tu tanga.
Te abrazas a mi cuello y tomándote por las caderas levanto tus pies del suelo, me rodeas con tus piernas, pegas tu boca a la mía y exhalas en ella tu dulce y cálido aliento.
Muerdo tus labios, suspiras, gimes, tiemblas, me abrazas fuerte cuando me sientes en ti, muy dentro, Tu espalda contra la pared, sin salida, tus caderas se contonean con frenético ritmo sacando de mi ese a****l que llevo dentro.
Estallamos juntos en intenso orgasmo cuando susurro en tu oído cuanto te deseo ….de tu garganta escapa un grito nacido del placer intenso.
Despacio resbalas por la pared, yo te acompaño sin escapar de tus entrañas, hasta llegar al suelo.
En la vieja madera reposas sobre mi sin dejar de abrazar mi cuello, lames mi cara agradecida y yo deposito en tu frente un tierno beso….
Apoyando tu cara en mi pecho escuchas el arrullo de una canción que conoces bien y sonríes
Suspiras, cierras los ojos y escuchas entre mis ronroneos una corta frase que se instala en lo mas profundo de tu alma…
“Te quiero “perra” mía”
Ahora tu mente solo desea que mañana “Tu Perfido Diablo” vuelva para esperarte tras la puerta.
10 years ago